Me da un no-sé-qué estar horneando y comiendo pan casero hecho con masa madre, que en si es literalmente una masa llena de bacterias vivas. Según por lo que me he informado son benéficas para la mejor digestión y aprovechamiento de los alimentos, pero al mismo tiempo siento que si me descuido en el mantenimiento de la masa madre voy a estar comiendo harina putrefacta y altamente tóxica.