En mi búsqueda de unos nuevos audífonos, me topé con los Marshall, cuya apariencia llamó inmediatamente mi atención. Sin embargo, al sumergirme en las reseñas, descubrí que generaban opiniones polarizadas. Algunos elogiaban su comodidad como uno de sus puntos fuertes, mientras que otros los criticaban por lo contrario.
Lo que sí parece ser consenso es que su calidad de sonido se sitúa en un término medio, lo cual considero justo por el precio que ofrecen. No esperaba que fueran excepcionales en este aspecto, pero tampoco decepcionantes.
Para mí, esta será la primera vez que priorizo la apariencia al elegir un dispositivo electrónico. A lo largo de mi vida, siempre he optado por productos que, aunque no me parecieran estéticamente atractivos, destacaban por su desempeño técnico.
Mis amigos y conocidos saben que soy meticuloso al extremo al seleccionar mis gadgets. Solía resultarme gracioso que me pidieran recomendaciones, esperando detalles técnicos, solo para sorprenderme al mencionar preferencias de diseño como color o tendencias de moda.